viernes, 16 de octubre de 2009
Entre los Hitler y los Gandhi
En una entrevista reciente que diario Perú 21 le hizo a John Kotter, primera autoridad mundial en el campo del liderazgo, me hizo pensar que lejos estamos muchos jefes o gerentes de la Corporación FONAFE de ser verdaderos líderes contemporáneos.
Kotter dice: “Creo que al mundo le sobran los gerentes y los jefes, y lo que le falta son más líderes”.
Es que la diferencia entre el líder y el gerente yace en las diversas concepciones que ambos tienen acerca de las personas de su entorno empresarial.
Los gerentes buscan progreso, estabilidad y control, e instintivamente tratan de resolver problemas del modo más rápido posible, en suma: eficiencia.
Los líderes, sin embargo, son más tolerantes y asumen con mayor paciencia una falta de estructura, siendo capaces de retrasar los procesos hasta lograr un conocimiento profundo de los problemas.
Los gerentes tienden a asumir una actitud impersonal y a veces pasiva con respecto a las metas. Las metas gerenciales surgen por necesidad y no por deseo; mientras que los líderes piensan en las metas, en las personas y son proactivos más que reactivos.
La empresa actual, sea pública o privada, requiere de líderes más que de jefes o gerentes. Necesita de aquellos que busquen el bien común, con una visión que beneficie a los demás, que sean inclusivos.
Según Kotter el liderazgo empresarial moderno tiene que ver más con ayudar a las personas y a las organizaciones a adaptarse al cambio.
Dice que mientras ser gerente o jefe está en el proceso de planificación, de control, de personal, de eficiencia, ser líder otorga y crea una visión de futuro, inspira a la gente y hace que esta asimile el cambio y lo haga suyo.
¿Dónde estamos?
Kottler explica también que hay líderes que son Gandhi porque tienen visiones que buscan ayudar a mucha gente, mientras que hay jefes o gerentes que son Hitler porque no piensan en los demás sino en sí mismos.
Los Gandhi del mundo tienden a motivar a las personas, a crearles sueños y esperanzas. Los Hitler del mundo usan el temor y hacen responsables de sus problemas a otros grupos.
Hay líderes que buscan servir a una sola persona, por ello no serán considerados grandes líderes, pues crearán enormes problemas a los demás.
Los Gandhi no trasladarán a otros sus deficiencias, mientras que los Hitler siempre encontrarán fallas en los demás. Los Gandhi aceptan sus errores, los Hitler nunca se equivocan y generalmente acusan a otros por sus errores cometidos.
Duras frases de Kottler pero creo yo que algunos jefes, funcionarios y altos ejecutivos de la Corporación FONAFE debemos reflexionar si somos líderes en nuestras empresas, si actuamos como los Hitler o como los Gandhi. Es tiempo que veamos personas, no objetos, que sirvamos, no nos aprovechemos.
Es tiempo de replicar un liderazgo de eficiencia y de servicio.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario